viernes, 9 de abril de 2010

Primera semana de clases

No puedo explicar la alegría que tengo por esta nueva fase en la vida de Gabriel. No creí que se adaptaría tan rápido, ya que es una característica del autismo la resistencia a los cambios.
Todos los días veía a Gabriel despertarse (ha dormido sus 9 ó 10 horas en promedio sin uso de rivotril) y ha desayunado con muchas ganas y se ha ido con Yngrid sin chistar, sin enojarse o sin demostrar alguna intención de no ir, y estoy seguro que dieron resultado las constantes explicaciones que le dimos Marina y yo el fin de Semana Santa.
Le comentaba a Marina mi miedo de que Sofía entrara a su nido y la pena que sentiría Gabriel por la ausencia de su hermanita; pero como son las cosas no?, todo sucedió al revés y Sofía se ha adaptado a la ausencia de Gabriel, pero apenas viene lo busca y ambos juegan mucho, notándose que se extrañan.
Gabriel cuando llega se dispone a asearse y a almorzar. Ya no pide mucho a los demás, se está controlando bastante. Luego se pone a ver su TV o a jugar con Sofía. Ha sido bueno mantenerlo despierto hasta las 8:30 p.m. para que pueda descansar bien.
Por lo tanto, estoy feliz. Se que el cariño y la dedicación de las especialistas del CASP lo ayudarán, agradezco a las profesoras Cecilia y Diana por aceptarlo. Aún no nos conocemos, pero espero verlas pronto para conversar.
Hoy sólo ha presentado un fastidio estomacal, pero creo que ha sido por meterse el pincel en la boca (tal vez con pintura) como cepillo o por haber comido algo pesado.
Mañana no tiene clases y aún estamos pensando con Marina qué actividades debería tener en el día libre. Mañana lo veremos. Bye.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta mi escrito.