¡Navidad, Navidad!

Aquí de nuevo. Cumpliendo con el objetivo de escribir un post diario sin fallar, les cuento que luego de desayunar con mi familia, mi tío Víctor nos visitó para tomarnos unas fotos familiares (lindo detalle) para su álbum. Lamentablemente ya no tengo mi cámara porque mi hermanito menor la malogró...eso pasa ¿no?

Luego de esto nos dispusimos a arreglar nuestras cosas para ir a la casa de mis suegros, eso fue cerca de las 12 m.
La idea era ir con el triciclo hasta la Av. Arequipa pero apareció un taxi en Junín y lo tomamos hasta la casa de mis suegros (qué difícil es encontrar taxis en fiestas!).

Cuando llegamos, y como siempre, nos recibieron con mucho cariño y nos dispusimos a cambiarnos, pues había salido un poco de sol y con los chicos ya empezábamos a sancocharnos.

Nuevamente los chicos adelantaron su almuerzo que consistió en arroz blanco con costillas de cerdo, pastel de acelga y gelatina con frutas. Gabriel y Sofía comieron con mucho entusiasmo. Además tomaron su gaseosa y jugo de frutas. También hubo helados con waflers, pero a Gabriel no le gusta el helado, lo contrario de Sofía.

Fue una bonita reunión ya que llegaron los tíos de Marina: el tío Lucho y la tía Carmen con los primos Julio y José. Conversamos, bromeamos y la pasamos muy bien. Aunque estábamos bien cansados nos divirtió mucho jugar con Gabriel y Sofía. Para los que no conocen donde viven mis suegros, hay juegos para niños y un jardín grande, así que ya se imaginarán las correteaderas que han tenido mis enanos. El resultado de esto fue que nos dimos cuenta que Gabriel y Sofía se enseñan cosas entre ellos. Por ejemplo, Sofía ya se sube por las mallas hechas de soga y las escaleras y se lanza por el tobogán teniendo solo un año y medio!, eso es porque Gabriel se lo ha enseñado. Igualmente Gabriel ya sabe patear la pelota porque Sofía le ha enseñado a hacerlo. Esto es muy importante y estamos aplicando lo que Jovanna nos enseñó: Sofía debe ser la maestra de Gabriel, pero también se va a dar lo contrario. Lo ideal es que ambos se quieran y se apoyen durante su vida, como lo hacemos actualmente entre mis hermanos y yo.

Otra cosa que nos llamó la atención es que mi suegro estuvo viendo un concierto de Andre Rieu, muy bonito, y Gabriel se puso a verlo y a escucharlo con mucha atención. Esto debemos explotarlo, pues puede ser una habilidad que aún no conocemos.

Salimos de la casa de mis suegros cerca de las 5 p.m. y los chicos estaban bien cansados. Al llegar a casa Sofía se durmió y Gabriel también, pero me preocupó el que no hubiera tomado su pastilla de denoral y lo desperté con la intención de que tomara su leche con el medicamento y se vuelva a dormir. Marina se fue a acostar con Sofía, pero Gabriel se quedó despierto hasta las 8 p.m. así que le tuve que dar su otro medicamento (rivotril) pues estaba muy ansioso y aparte le di su cena (muy poco, debido a que ya había almorzado bastante). Marina y Sofía se despertaron a las 8 p.m.

Sofía acaba de quedarse dormida abrazando a su ardilla de plástico. Esta ardilla aunque no lo crean, tiene cerca de 37 años.

Bueno, estamos muy cansados y mañana me reuno con mi hermano Richard, padrino de Gabriel, así que debemos acostarnos. Espero hayan pasado una linda Navidad en compañía de sus familiares y que hayan rescatado lo esencial que nos eneseña esta festividad: LA IMPORTANCIA DE LA FAMILIA Y LA AMISTAD. Bye.